Docente Amada, por Abril Sánchez Guerra
Atravesada por diversos miedos y nuevas emociones, me enfrento a una desconocida etapa que me remite a aquel recuerdo de todo aquello que me contaba.
Hoy, orgullosa de mis logros y con su recuerdo guardado en la memoria,
se me agranda el corazón cuando hago lo que más le apasionaba, lo que tanto le
gustaba, lo que más amaba. Y ahora lo que tanto amo yo.
La docencia es el amor más puro que se puede recibir, se siente en cada
abrazo, en cada sonrisa, en cada mirada y en esos ojos brillantes que te
observan y solo expresan amor.
Y al final me di cuenta, de que ella tenía razón. Que la docencia es
eso, la mejor muestra de amor, que perdura por años y se guarda en el
corazón.
Abril es estudiante del Instituto Superior de Formación Docente y Técnica Nº 65 de San Cayetano, cursa el Profesorado de Educación Primaria, y como partícipe del Taller de Autobiografía Mínima nos comparte el texto elaborado en dicho Taller
Abril, tu bello texto trasluce amor, amor por esa abuela docente tan querida, y amor por la maravillosa misión de enseñar! Gracias por compartirnos tus vivencias, que son también el reflejo de tu vocación!
ResponderEliminarHermoso texto 👍👍👍💯💯
ResponderEliminarHermoso texto Abril, de mi querida vecina . que lindo q sigas sus pasos en la docencia.. abrazo afectuoso
ResponderEliminarQue lindo amiga 🫶
ResponderEliminarLa señora Esther mi maestra de quinto grado una docente de diez
ResponderEliminarHermoso hijita, tu vocación y el recuerdo de la abu.
ResponderEliminar