Amiga inesperada y querida, por Silvia Travaglia


Esto se llama Amiga inesperada y querida porque recordé mis primeros pasos de trabajo en San Cayetano, cuando nos conocimos. Sabíamos una de la otra, pero no nos tratábamos.
A mi me causaba cierto escozor relacionarme con gente que participaba de lo que yo consideraba "el poder" (Eras la Abogada del Municipio) pero las tareas que me gustaba realizar requerían de una escucha más sensible y especializada y por aquel entonces, no por falta de voluntad sino porque era otro momento histórico y social, no era fácil encontrar eso.
Y lo que encontré fue que pudimos compatibilizar un montón de intereses comunes, relacionados con la Acción Social, la apertura para animarnos a participar en Programas de la Provincia, como el de "Prevención de Adicciones" que recién se iniciaba y que requería la presencia de un representante del Distrito, en Necochea, en Buenos Aires, en La Plata porque aún se estaba en las preliminares y no era fácil introducirlo en cada Partido, había que viajar y yo ya viajaba. Y lo hicimos, allí se comenzó con el tiempo, la Escuela para Padres, Grupos de Reflexión sobre diversos temas y tantos otros derivados que se encontraron con barreras como "Ay, pero mirá si va a haber droga en San Cayetano". Confieso haberme sentido una hereje en ese momento, díganmelo ahora y veamos.
Se me viene el recuerdo de las personas que trabajaron con nosotras. Las administrativas que eran indispensables y que nos sacaban de apuro más de una vez, colaborando con un afecto enorme, Graciela Godoy, Marcela Macedo.


 Para ese entonces yo permanecía dos días a la semana en San Cayetano, motivo por el cual me era indispensable hacer todo con rapidez, o sea, a un ritmo inusual para el lugar, donde todos trabajaban con tiempo y tranquilidad, yo corría mucho más que en Buenos Aires sin duda. De modo que la gente de mi alrededor debía sumarse a eso y lo hicieron brillantemente, con amabilidad, eficacia y cariño.
Teníamos contacto con el Sistema Educativo como un detector de las problemáticas privilegiado, ahi es donde quiero agradecer a Mirta Serafini y Eva Menna que desde sus roles de Inspectora y Presidente del Concejo Escolar respectivamente, gestionaron mi ingreso al Hospital entrevistándonos con el Intendente y luego colaborando en lo que necesitáramos.
Fueron valiosos los aportes de la Licenciada Patricia Pecker, Terapista Ocupacional, con quien intercambiábamos experiencias e ideas, ella fue la impulsora del primer - y único hasta la fecha- Taller Protegido de San Cayetano,  el Taller Protegido Umbral.
Un capítulo aparte merecen las Trabajadoras Sociales. Andrea Pinto desde el Hospital, Claudia González en el Municipio, Verónica Natale en el Centro Educativo junto a su Directora Cristina García, Amelia Evagelista y Belén Arana desde la Escuela Especial, Directora y Trabajadora Social.
En el Concejo Deliberante contábamos con la doctora Belén Eguren, quien se sumaba a nuestras reuniones y ayudaba en lo que se necesitara aprobación para ser realizado.
No quiero olvidarme de Claudia Cuesta de la Lic Marta Tano, de la Lic Gabriela Martínez (psicólogas) y otras en sus roles de Asistentes Educacionales , como se llamaban en ese momento y en general de todas las Directoras, Vicedirectoras, Secretarias de cada escuela, jardín. Cada una ponía su granito de arena y nos ubicaban en una realidad a la que tenían un acceso más directo que nosotras.
El apoyo y la colaboración de la Doctora Vivian Rivarola y los contactos institucionales con A.L.C.O, fueron otros de los hilos de la trama comunitaria que intentamos tejer.
Nos divertimos mucho, junto con la gente que trabajaba con vos. Llamábamos "Tío" o "Tía" a los funcionarios provinciales que nos enviaban alguna directiva y las chicas se prendían," llamaron de parte de Tía Chiche o de Tía Alba nos decían". Logramos que se acerque mucha gente a las tareas comunitarias que propusimos. Eramos una máquina de generar propuestas y fue una época feliz y fructífera de intercambio de tareas entre Municipio, Hospital y Escuelas.
Tuvimos, entre nosotras, muchas coincidencias y diferencias, más las primeras que las segundas. En el transcurso de todo eso surgió una amistad que trascendió los límites laborales y que lleva casi unos 30 años.
En esa amistad siguen habiendo diferencias importantes, y las discutimos. Debo reconocer que son más las veces en que vos tenés razón y que, a regañadientes, te lo hago saber.
Esta vez quise resaltar nuestra amistad a través de una posible diferencia de opinión que no viene al caso detallar, creo que ahi está la riqueza de un vínculo, en el intercambio y las diferencias.
Amiga inesperada es porque nunca pensé que pudiéramos serlo en el inicio. Y ya no recuerdo cuando dejamos de hablar de trabajo.
En esta fotografía estamos celebrando mi despedida por  mi primer viaje a Europa

                    Supuse que me ibas a hacer tu crítica al escrito inicial, con ese espíritu componedor que te caracteriza.
Y por supuesto lo hiciste y este texto ya no es el original, sino uno mucho más lindo y constructivo.
                                                                   Silvia Travaglia



Silvia  ha escrito en este Blog  muchos textos, todos  bellos, movilizadores y diversos, los dos anteriores a éste son " Qué apuro hay?" que puedes ver acá     y " Vida Guille" que lo puedes ver aquí

Comentarios

  1. Silvia recuerdo con tanto afecto los tiempos de trabajo en ela Uceff, la Prevención de Adicciones, la Escuela para Padres, la gente linda con la que trabajamos y su apertura...buenos tiempos que quedan para siempre. Tu bello texto además de alegrarme, me llena el corazón...para mi también fue una amistad inesperada, rica, auténtica, con discusiones y diferencias, pero plena y sólida, siempre se que estás y eso me reconforta el alma, gracias por recordarme ese tiempo de labor fructífero, y gracias a Dios porque seas mi amiga muy querida....

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  2. Amiga: me di cuenta que no puse tu nombre en ningín momento del escrito. Lo pensé y me doy cuenta ahora de que, aun sin las fotos, no necesito poner un nombre a quien siento incorporada como una parte muy importante y feliz de mi vida. Sin dudarlo, pese al cansancio y las dificultades (también tenia otra edad) esa fue para mí, la mejor época de mi vida. No añoro la infancia ni mucho menos la adolescencia, pero esa época sí, muchísimo!!!
    Muchas gracias!!!

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    1. Gracias a vos!!! Siiii fue un tiempo feliz y fructífero!!!!

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  3. Una amistad que florece para ayudar a los demás...

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    1. Gracias Silvia Santipolo!!! Vos fuiste parte de ese tiempo de hacer, con las microemprendedoras, participaste mucho, y siempre , siempre positiva!!!

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